Vaya semanita

Empecé la semana contenta. Turno de tarde. Que bien. Ahora puedo sacar mas rendimiento al tiempo libre.
Biiiip. Error.
Primero: Tenia que llevar mi perrita a esterelizar ya que está en la edad del pavo y con los lobos que tengo en casa, pronto pronto me podrian dar una sorpresa y hacerme abuela. Asi que nada. Quedo con la veterinaria para llevarla esa semana.

Lunes: Aprovecho para salir a correr un poco y ver que tal el gemelo despues de las dos semanas de completo descanso.
10kms trotando a ritmo cochinero pero lo mas importante: El gemelo no ha dicho ni "mu". Bien. No estaba con humor para escuchar a musculos quejicas. Prueba superada. Ya puedo volver a "korrer".

Martes. Cogo la flaca y pillo carretera hacia la N-II.
Para los que no conocen, la N-II es lo mas llano que puede haber aqui cerca de mi casa. Viviendo al nivel del mar es lo que pasa, o tiras hacia el monte y no encuentras 1 km llano, o queda la opcion NII, que no es que sea llano, lo que se dice llano, pero es lo mas parecido.
La putada es que casi siempre hay aire. Y en la mayoria de las veces, el aire pega en el sentido favorable a la ida, y de cara a la vuelta.
Es algo raro, porque sales de casa y segun vas pedaleando piensas:"-Ohhhh, que bien voy, que fino estoy".
Pero cuando das la vuelta, te encuentras con la cruda realidad. Toca arrastrarse como un globero.
Asi que conocedora experimentada de ese efecto, despues de aprovechar el "empujon" del aire hasta Calella, a la vuelta decido darle planton a Eolo y volver por el interior. Cogo el desvio hacia St.Cebria de Vallalta y pillo la carretera de Mata. Asi escapo del aire, pero no me libro de las subidas. Dá igual, prefiero verme las caras con las pendientes y la tranquilidad de la montaña, que tener que enfrentar el trafico y el aire en la nacional.
Llego a casa con 62kms y muy contenta de por fin haber podido coger la bici entre semana.
Miercoles: Toca llevar Duna a la veterinaria asi que nada de deporte.
Jueves: Tampoco he podido hacer nada. Pero para compensar, tampoco he podido dormir. Entre que Duna está recien operada y su compañero Beltza la hecha de menos y no pára de llorar toda la noche...aissss, que perro mas romantico tengo. Le separan de su compañera y resulta que no come, no bebe y encima se pasa todo el tiempo llorando. Pobrete.

Viernes: Tocaba volver con Duna a la veterinaria para revision. Todo bien. Pero tampoco pude salir con la bici. Tengo mono. Que hago? Pues sencillo: Ir al curro en bici.
A todo eso, hay que añadir que esa semana, empezamos el horario de invierno en el curro. Durante los meses de diciembre, enero y febrero, en el turno de tarde toca salir media hora mas tarde, asi que en lugar de plegar a las 22:15, ahora plegamos a las 22:45. Ahh, y tambien curramos los sabado. ¡Que alegria nennn! (modo ironico ON).
Asi que el viernes, me armé con la bici y todos los dispositivos de iluminacion que disponia en casa. Habia que estar bien preparada para la vuelta.
El viernes plegamos antes, a las 20:00. Eso es porque al empalmar dos turnos seguidos, por el reglamiento interno de la empresa hay que dejar 12hrs de descanso.
A la ida bien, es de dia. Todo dentro de la normalidad.
A la vuelta...20:00. Vestida de romano en la puerta del curro me preparo para volver a casa. Mis compañeros me dicen que estoy loca, que estoy como una cabra?!?! Y donde está la novedad? jejeje
Jaume tambien salia con la flaca, y que quedamos de encontrarnos en La Roca, asi el se ahorraria el tramo mas peligroso que es la carretera que une Vilanova del Valles a La Roca, donde no hay arcén.
Salgo del curro y cuando cogo el corto tramo de 1km que une el poligono industrial con Vilanova, todo oscuro. Ufff, que palo. Yo creía que al ser puente y a esas horas de la noche no habrian muchos coches, pero si que habian. Y nada mas empezar la carretera ya me pasa uno a escasos centimetros. Cabrooooon!!!!!
Bueno, quizas ya me haya tocado el sub-normal de turno y ahora pueda ir mas tranquila. Pero es imposible ir relajada, siempre voy echando miradas hacia atras por si viene coche. El lado positivo es que a esas horas no hay camiones!
Llego a Vilanova y entro en la carretera que lleva a La Roca. Ese es el peor tramo. Ya es jodido ir de dia por alli, porque es una carretera con un tramo de curvas seguidas y sin nada de arcen, ni una misera cuneta de tierra.
Intento ir lo mas rapido que puedo y cuando escucho el ruido de algun coche que se acerca, me pongo en alerta. Llevo luz trasera, chaleco reflectante y cinta reflectante en el brazo. Pero todo me parece poco. Pasan unos pocos coches y para mi alivio, guardan distancia al adelantar. Por fin llego a La Roca despues de lo que me ha parecido una eternidad en estado de tension y alerta.
Paso La Roca y empiezo a subir Parpers, a media subida me encuentro con Jaume y seguimos los dos juntos hasta casa.
No he pasado ni pizca de frio, todo lo contrario, calor. Quizas iba demasiado abrigada o es que iba tan tensa que ni reparaba en las sensaciones termicas, jaja
Cuando llegamos en casa respiro aliviada. Uffff, que subidon. Pero....me ha gustado, asi que...mañana me voy al curro en la flaca. (Con permiso del oso por supuesto).
Eso es todo lo que veia en la carretera:

Sabado: 6:00a.m. Suena el despertador como tantas otras veces en que lo pongo para ir al curro en bici. Lo apago pero me quedo en la cama con ganas de ponerlo para 1hora mas tarde y ir en coche. Suena el segundo toque. Me levanto. ¡¿¡¿ Que me está pasando?!?!?! Voy al baño, me visto de romano, y mientras cepillo los dientes me miro en el espejo y no puedo creer. De verdad he vencido al oso y estoy preparada para ir al curro en bici?!?!
Pues si, aunque me cueste creer, estoy vestida, bajo las escaleras, cogo la bici y me pongo en marcha.
Está todo oscuro. Algunos coches me pasan pero la mayoria guarda la distancia. Voy mas relajada que ayer por la noche cuando volvia. Creo que me estoy acostumbrando a eso. Seguramente despues de unos tantos viajes me va parecer tan normal como rodar de dia.
De todas formas, algunos tramos siguen siendo muy jodidos. Subir Parpers es lo mas relajante que hay.
Debido a que ayer pasé calor, hoy decidí ir menos abrigada. Craso error. Empiezo a bajar Parpers y mis dedos se van...uno a uno voy dejando de sentirlos. Brrrr, que frio.
Bajo con cuidado porque de ese lado suele haber heladas en la carretera. Llego a La Roca y a esas alturas no me siento ni las manos, ni los dedos de los pies. ¿Donde se habran quedado?
Ahora toca el tramo jodido La Roca-Vilanova. Aprieto para pasarlo cuanto antes. Hay suerte, apenas me pasan 4 coches. Llego a Vilanova y ahora solo queda el km de la muerte, una cuesta arriba donde no hay arcen, y ademas es paso de los camiones de una cantera y tambien ruta para coger la AP7. Con suerte, hoy no hay curro en la cantera, pero no me libro de otros camiones y coches que van a la autopista. Por lo menos no son tantos como entre semana. En ese tramo por mucho que quiera ir de tranki, siempre tengo que acabar haciendo alguna serie para llegar arriba y por fin apartarme al arcen. Tambien empieza a haber un poco de claridad y eso siempre es un punto en mi favor.
En contra, el frio me sigue castigando. Llego al curro temblando. Mis compañeros siguen pensado que estoy loca y como una cabra, andaaaa, igual que ayer. Vaya novedad!
Pongo en agua de la ducha para calentar y me meto debajo del agua caliente para recuperar un poco de calor. Cuando la sangre empieza a circular en mis pies, siento ese dolor tan caracteristico en los dedos, que parece que alguien te está pegando martillazos. Aiiiiiiiiiiiiiiii, grito de dolor debajo del agua. Me quedo allí un rato hasta que recupero la temperatura. Por fin puedo salir, vestir la ropa del curro, tomar un café calentito y enfrentar la jornada de casi 8hrs que me espera por delante. Por lo menos, para mi consuelo, la vuelta a casa será con luz del dia y de tranki, ya que no hay prisa.
Y asi se me acaba la semana. Ahora intentar descansar que mañana tenemos ruta en Arenys, otra quedada de esas con almuerzo de por medio y donde las risas estan garantizadas.