Resumiendo en una frase:

Ha sido un viaje alucinante.

Aqui la foto del grupo en la cima del Tourmalet

He conocido una gente estupenda. En un grupo tan heterogeneo hay de todo y no sabes lo que te espera, pero nuestro grupo era fantastico. Habia, contando conmigo, cuatro chicas. He escuchado que ha habido grupos sin ninguna, así que he tenido suerte. De las tres, he tenido más conversacion con Izaskun pero las otras dos (Mery Joe y Nerea) tambien eran muy cañeras.

Del grupo de chicos...que decir, eran todos majisimos. Claro que con tanta gente, no llegas a tener conversacion con todos, algunos resultan muy callados y luego en el ultimo dia coincides un rato con ellos y resultan unos charlatanes de ordago, pero claro, como antes no habia tenido oportunidad, no les habia conocido esa faceta parlanchina.

Hemos compartidos una semana tremenda subiendo estos puertacos. Algunos ya eran veteranos subiendolos, pero seguro que algunos más, igual que yo, era la primera vez, y seguramente alguno más habra sentido esa emocion al subir algunos de estos "monstruos" .

Jaume y Pedro disfrutando de un refresco en la cima del Peyresourde.

No puedo poner nombre a todas las caras porque yo con eso de los nombres soy fatal. Pero claro, estan los que mas contacto he tenido: Pedriiiiiito (viejo amigo Pirata), compañero de birras, Jose Luis (que suele leer el blog), Bernat, Albert y Ramon (que tambien fueran desde Catalunya), los hermanos "Slecker"(Igor y Martin,que iba de primera comunion en la ultima etapa) , Eneko (que siempre me quitaba las pegatinas en las bajadas) , Jose Luis (de Artea), el eterno "ataca desde atras", jajaja, Ramon (el lider siempre olvidado en la cola del peloton), Ricardin, el "bailarin", que charla nos dio sobre los bailes de salon, todavia me rio al imaginarlo con el traje de luces. Los malagueños, Rafa y Antonio, el ultimo tenia aterrorizado a Ivan con eso de no poder dormir de espalda. Jajaja, que peligro. Tambien recuerdo a Paco (siempre muy callado), Alvaro, Argoitz (con su gorra como los pros), los dos que llebaban equipacion de "chamartin"(uno llegó primero en Larrau), enfin, son tantos, tanta gente, algun momento compartido en esas subidas y bajadas, en la cervecita de fin de tarde. Sé que dejo de nombrar algunos, más que nada porque no recuerdo el nombre, pero si los recuerdo en persona, como el chico de Vitoria del cual nos despedimos el domingo por la mañana, que se olvidó la chaqueta y el vino en el albergue... Pido perdon a los que no he nombrado, pero tened por seguro que tengo muy buen recuerdo de todos.

Los hermanos "Slecker", Eneko, Argoitz y cia.

Aqui en la salida de la ultima etapa, con Jose Luis.

A ver si consigo las fotos que tengo con las chicas y las cuelgo aqui.

Y por ultimo, la gente de la organizacion. Biktor, Iñigo, Raul, Paco y Elena. Siempre cuidandonos, atentos a todo, sin ninguna mala cara ni nada asi en ni tan siquiera un segundo. Fantastico. Que caña con Paco, no paraba un minuto ni siquiera al acabar la etapa y alojarnos todos. Siempre aparecia con la bolsita de frutos secos para acompanar nuestras cervezas. Muchas gracias a todos. Elena, que siempre nos recibia en las cimas de los puertos con el avituallamiento preparado y una fantastica sonrisa en la cara. Y Raul, que se paraba en las subidas para sacarnos fotos y como masajista oficial, ha recuperado las patitas de más de uno.

Ganas de volver? Muchas. Son las vacaciones ideales. Pero claro, tambien hay nuevos horizontes ahi fuera esperandonos y no hay tiempo ni dinero para todo. En algun momento hay que eligir y para el año que viene no sabemos todavia donde iremos, pero seguramente, la Pirenaica es una de la opciones de la cual no te arrepientes jamás, y de la que traes muy buenos recuerdos. No importa el nivel, puedes andar mucho o poco, ir en el grupo de delante picandose a ver quien corona primero el puerto, en los grupos de medio o incluso en el grupo del farolillo rojo, todos lo disfrutan mucho, no hay prisas, no hay competicion ni hay mal rollo. Cada uno compite con sus proprios limites.

En especial, esa sensacion de volver a convivir con la gente del norte, donde he vivido 10años y de donde tengo tan buenos recuerdos (mi corazon todavia tiene un pie alli en Euskadi). Esa manera de vivir el ciclismo no lo encuentras en ningun otro lugar. Echo mucho de menos eso.